
FOMO: El miedo a quedarse fuera
Recuerdo un capítulo de Los Simpson, ya parte de la historia simpsoniana, donde Homer se siente “fuera de onda” al no poder conectar con sus hijos. La música y la cultura que él conocía ya no se llevaba cuando era joven.
En un flashback, aparece junto a su amigo Barney cantando frente al espejo. El abuelo Simpson se pregunta qué están haciendo, y Homer le explica que están rockeando. Entonces, el abuelo suelta una de sus frases más célebres y predictoras del futuro:
“Bueno, yo antes estaba en la onda, ahora estoy fuera de onda y ya no entiendo la onda; a ti te pasará lo mismo.”
Sin saberlo, Los Simpson estaban describiendo el FOMO: el miedo a quedarse fuera.
Siempre ha existido, pero ahora es más fuerte
El FOMO no es nuevo. Siempre hemos tenido miedo a quedarnos atrás, a no encajar en ciertos lugares, y a sentir que debemos hacer cosas o asistir a eventos para ser parte de un colectivo social. Somos animales sociales: necesitamos interactuar para sentir que pertenecemos a algo más grande.
Pero, ¿por qué ha adquirido tanta fuerza hoy? ¿Qué relación tiene con los festivales?
Redes sociales: el amplificador del FOMO
La sociedad actual está hiperconectada. Una imagen, un video o un pensamiento compartido en redes sociales tiene más fuerza que un pensamiento libre. Esto crea grupos unidos por un temor común, más que por un ideal.
Si abres Instagram, verás gente en playas paradisiacas, haciendo rutas increíbles o comiendo en los mejores restaurantes. Nadie quiere quedarse atrás. Impulsados por ese miedo, decidimos meternos en aventuras solo para no sentir que nos quedamos fuera.
Festivales y conciertos: el terreno perfecto
Cuando vemos que vienen Iron Maiden, Metallica, Rammstein o Judas Priest a España, no podemos ser los últimos en verlos ni decir “no fui y me lo perdí”. Quedamos automáticamente fuera del grupo “Jevy”: se nos cae el pelo, nuestras camisetas se vuelven blancas y dejamos de pertenecer a esa élite social.
Esto provoca saturación en la compra de entradas para eventos como Rock Imperium. Muchos pagan 250 € por 15 bandas y 3 días de festival con un único escenario, solo para poder decir:
“Yo vi a Iron Maiden en Cartagena en 2026.”
Subimos la foto a Facebook, mostramos que pertenecemos al grupo influyente, pero muchas veces olvidamos mirar nuestro bolsillo y pensar que es un auténtico atraco. Solo por miedo a quedarnos fuera de onda hacemos locuras que luego lamentamos.
Elegir bien es clave
No está mal asistir a un evento si se puede permitir o si realmente nos gusta. Pero debemos ser conscientes de qué festivales realmente valen la pena. En un momento de saturación económica, no conviene gastar mucho en eventos que ofrecen poco a cambio. Solo por miedo a no pertenecer a la élite, muchos asistimos sin pensar en el futuro.
Tal vez ha llegado el momento de darnos cuenta de que hay batallas que no deberíamos permitir.
2 comentarios en «FOMO: El miedo a quedarse fuera»